Jirones de periódico

Atribulaciones y publicaciones de una escritora y periodista madrileña en la aldea gallega

11 octubre 2006

Entrevista a Gomaespuma. La primicia primiciosa

“Ahora es más fácil llamar a la gente, porque saben quién eres y eso facilita las cosas”

Pocas veces el pregón de unas fiestas había despertado tanta curiosidad como la más anunciada de las actuaciones. Todo por conocer en persona a las voces con las que centenares de personas se han despertado a carcajadas cada mañana y con las que ahora, en un nuevo dial, comparten el café de sobremesa con el mejor humor.

Llegaron, hablaron y vencieron. Juan Luis Cano y Guillermo Fesser, las dos mitades que integran Gomaespuma, el dúo periodístico con más humor de la radio, abrieron con risas y rimas la actual edición de la Fiesta del Marisco de O Grove. Todo un lujo que casi nadie se quiso perder. La inmediata consecuencia de la aglomeración fue el cariñoso “acoso y derribo” al que fueron sometidos Fesser y Cano al bajar del escenario de la carpa grande, donde, debido a la lluvia, se realizó el pregón. Todo el mundo quería una foto, una firma o un beso para el recuerdo.
_ Habéis despertado una expectación increíble entre las gentes de O Grove y los turistas, ¿os lo esperabais?
Juan Luis: Eso porque lo dices tú, nosotros no sabemos si es más o menos normal.
Guillermo: Pasa porque tenemos cara de marisco, y claro, la gente se vuelca.
Juan Luis: Yo tengo cara de cigala...
_Vuestro humor ha marcado un hito en la radio de este país, algunos os han comparado incluso con Gila...
J.L.: Creo que no tiene nada que ver, es otra manera de hacer las cosas, otra historia. Gila era un genio, me parece un honor, pero creo que no tiene mucha lógica.
_Después de tantos años despertando a toda una generación de españoles a las 7 de la mañana en M80, ¿el cambio de horario no os ha hecho perder audiencia?
J.L.: Sí, además, donde se cuece el marisco es por la mañana, aunque aquí Guillermo y yo no coincidimos. Sé que por la tarde hay menos incidencia, pero para mi vida personal es mejor. Guillermo que es más madrugador cree que no.
G.: Yo no soy madrugador, odio madrugar, pero una vez que estoy fuera de la cama prefiero que el día sea más largo. Además, la radio por la mañana es muy emocionante, desde el punto de vista periodístico, porque estás en el momento en que la noticia se está produciendo. La tarde es más desde el punto de vista del espectáculo, porque puedes coger las noticias y darles una vuelta. Y hay mucha gente por la tarde, he descubierto que hay muchas personas que escuchan la radio a esas horas, que yo, que no la había escuchado en mi vida, no sabía quién podía ser.
_¿Alguna vez se han tomado muy, muy mal alguna de vuestras bromas telefónicas?
J.L.: Sí, aunque nosotros no gastamos bromas, nosotros lo primero que hacemos es presentarnos, no nos hacemos pasar por nadie ni engañamos a quien llamamos. Sí ha habido gente que se ha enfadado mucho. El año pasado, cuando Guillermo estaba rodando la peli, fue muy, muy, muy desagradable Aquilino Polaino [catedrático de Psicopatología de la Universidad Complutense], vamos, de hecho, me colgó.
_Ahora que ya se os conoce más, ¿es diferente?
G.: Ahora somos mayores, y sí es más fácil llamar a la gente, porque saben quién eres y eso te facilita las cosas, pero de todas maneras, cuando se ha enfadado alguien hemos dicho que lo sentíamos, porque nuestra intención no es que se enfade nadie, sino pasarlo bien.
J.L.: ¿Cómo se llamaba aquella señora del Real Madrid, que nos odiaba y luego nos hicimos amiguísimos?
G.: Era la secretaria de la Ciudad Deportiva, que la llamábamos todo el rato para entrevistar a gente, y nos cogió un asco que te pasas. Luego, al final, descubrimos que era fan de Raphael, y una vez que él vino al estudio le preguntamos si no le importaba llamarla de nuestra parte. La llamó Raphael, y la chica llorando de emoción. Después la mandamos un ramo de flores, y, a partir de ahí ya se hizo amiga nuestra.
_A veces las entrevistas parecían concertadas, porque muchos pensábamos “no pueden tener tanto morro de llamar así a la gente”...
G.: No, las llamadas no eran concertadas. Hombre, si entrevistábamos a un ministro sí, porque ya venía él al programa. Más bien estaban los entrevistados desconcertados.

Publicado en FARO DE VIGO, el Jueves, 12 de Octubre de 2006